Quienes han visitado esta exposición han podido observar el funcionamiento de estas máquinas, unas orientadas al campo de la gastronomía y otras al de la discapacidad,
Se trata de un viaje a un futuro antes impensable y ahora cada vez más cercano, que dispondrá de lenguas y narices electrónicas, de guantes que transforman en voz el lenguaje de signos o de navegadores de rutas por satélite para invidentes.
Estas máquinas están orientadas principalmente a los campos de la gastronomía y de la discapacidad
Que la curación de jamones pueda ser vigilada por un ordenador con olfato o que un bodeguero cuente con el apoyo de catadores electrónicos es sólo cuestión de tiempo, el que tarden los investigadores en perfeccionar los prototipos ya existentes.
El sistema funciona con sensores que detectan los aromas de un producto y que fundamentalmente ha sido probado en enología para, por ejemplo, medir la calidad de los vinos, de los que obtienen lo que definen como "huella electrónica olfativa", un carné de identidad con todas sus características.
El Instituto de Microelectrónica de Barcelona junto al CSIC y otras entidades trabajan también en lenguas electrónicas, como la mostrada hoy en San Sebastián, aún en pañales, pensada, entre otras cosas, para que el usuario pueda probar en la pantalla de su ordenador personal cómo sabe un alimento que quiera adquirir, o dicho de otro modo, para que las empresas muestren por internet sus productor con sabor incorporado.
AYUDA PARA DISCAPACITADOS
Si la informática pentasensorial abre grandes posibilidades para la gastronomía, los beneficios que ofrece a los discapacitados son sorprendentes y además tangibles ya en algunos casos.
Este es el ejemplo de ordenadores que, únicamente con el movimiento de uno de los ojos, permiten al usuario escribir y manejar cualquier programa informático.
Asociaciones de afectados por parálisis cerebral o el centro de tretrapléjicos de Toledo ya usan estos aparatos, que también pueden manipular enfermos de esclerosis lateral amiotrófica o de Parkinson y que se puede aprender a manejarlos en cuestión de minutos.
También se mostró hoy en San Sebastián un guante electrónico sensorizado, que puede traducir a voz gestos del lenguaje de los sordomudos.
Aún no desarrollada está una silla de ruedas en la que trabajan investigadores de la Universidad del País Vasco, concebida para aquellos minusválidos que no pueden mover las extremidades superiores, la cual puede moverse por sí misma y evitar obstáculos, aunque su usuario mantiene el control de las decisiones con el mínimo esfuerzo físico y mental.
Esta exposición, organizada por la Diputación de Guipúzcoa, la UPV y Bic Berrilan, ha tenido lugar dentro del VII Congreso Internacional de Ontología, que se celebra esta semana en San Sebastián bajo el epígrafe "De la caverna de Platón a Internet: lo real y lo virtual".